jueves, 18 de junio de 2015

Gobierno y Redes Sociales


Gobierno y Redes Sociales

Por todos es sabido que las redes sociales vinieron para quedarse y especialmente a cambiar la comunicación como la conocíamos anteriormente,  pasando a un modelo que permite la interacción entre medios, empresas y gobierno. Cambio que ha obligado a modificar su relación con una audiencia cada vez más participativa, crítica y opinante. 

Por ello, los equipos de comunicaciones tanto de  medios como empresas tuvieron que modificar sus tareas diarias e incluir a las redes sociales como una parte fundamental de la institución, para dar respuesta a los usuarios que a través de ellas, comparten contenido, consultas y reclamos hacia la organización y los otros usuarios. 

Esto lo refleja Bowman y Wilis en su libro “Nosotros, El Medio”, definiendo  el concepto de Periodismo Participativo como “el acto de un ciudadano o grupo de ciudadanos que juegan un papel activo en el proceso de colectar, reportar, analizar y diseminar información. La intención de esta participación es suministrar la información independiente, confiable, exacta, de amplio rango y relevante que una democracia requiere”.
 

De hecho, una medición de Shareablee publicada en noviembre de 2014 por el sitio de Comscore manifestó durante el mes de julio del año pasado que en América Latina hubo “un incremento del 127% en la participación en Facebook, Twitter e Instagram con 455,3 millones de acciones totales”, respecto del año anterior.

En definitiva, la comunicación y el uso de redes sociales se han convertido en una oportunidad para establecer un canal de comunicación e interacción efectiva y directa para promocionar la marca y generar una relación entre “institución pública y ciudadano”. 


Por ello, hoy los gobiernos y sus distintas reparticiones han debido actualizar sus procedimientos o estrategias orientadas a difundir las políticas públicas a través de los medios sociales o bien, responder sus requerimientos ante el flujo comunicacional que por medio de ellas publican. 


Los gobiernos se han tenido que actualizar sobre este contenido, tal como lo señala el video del Laboratorio de Ideas del Banco Interacmericano de Desarrollo, GobAAP: 





El Gobierno de Chile también tuvo que considerar este cambio y así fue como se creó la Guía Digital del Gobierno, una serie de recomendaciones para trabajar en en redes sociales, con la cual definió 10 preguntas (fig.1)  que ayudan a las demás reparticiones del Estado a definir el plan estratégico que requiere el organismo para, entre otras cosas,  determinar la  difusión de los beneficios y/o programas o establecer un canal de comunicación directo con la ciudadanía.

10 preguntas para definir plan estratégico



1.     ¿Qué es lo que la institución quiere lograr al tener presencia en las redes sociales?
2.     ¿Cómo se relaciona este objetivo con la misión institucional?
3.     ¿Cuáles son las plataformas que mejor se adaptan a estos objetivos?
4.     ¿Cómo se medirá el proceso y cumplimiento del objetivo planteado?
5.     ¿Cuál es el público al que quiere llegar la institución a través de estos medios?
6.     ¿Cuáles son los comportamientos de interacción que deseo generar con los usuarios (compartir, conectar, crear, colaborar, consumir un servicio)?
7.     ¿Cuáles son las fortalezas de la institución que se potenciarían con el uso de estos medios?
8.     ¿Cuáles son, comunicacionalmente, los flancos débiles de la institución, que pudieran ser un factor de riesgo o una vulnerabilidad al establecer presencia en estas redes?
9.     ¿Quiénes estarán a cargo de la administración de esta cuenta?
10.  ¿Cómo debiera ser el flujo de información dentro de la institución para mantener estas cuentas actualizadas diariamente.

Fig. 1. Guía de preguntas www.guiadigital.gob.cl


Sin embargo, si analizamos algunos de estos medios sociales no se puede identificar una estrategia clara, puesto que solo se limita a relatar lo que está sucediendo con la autoridad de turno (foto1), pero sin entregar datos relevantes al usuario específico o general para suplir sus necesidades de información o consultas. Este hecho, es más visible en los organismos regionales, seremis, direcciones, entre otros donde la falta de especialización o personal no permite tener un plan efectivo.

Foto 1


Cómo responder


Según lo que explica el Gobierno de Chile en su sitio Guía Digital, “uno de los  objetivos principales es impulsar el contacto directo con la ciudadanía utilizando todos los canales de comunicación disponibles. En este sentido, la disponibilidad de acceso a la información pública mediante canales digitales y medios sociales se presenta como una herramienta prioritaria para contribuir a fortalecer la transparencia e informar a la ciudadanía respecto de procedimientos, contenidos y fundamentos del ejercicio de la función pública”.


A ello, se suma el instructivo 112/14 de Ministerio Secretaría General de Gobierno, que establece que “los órganos de la Administración podrán hacer uso de las redes sociales, en la medida que ello facilite el dialogo con la ciudadanía (…) en un lenguaje cercano, procurando  que la presentación sea clara y respetuosa”.

También agrega que “el uso de medios sociales no solo implica escuchar al ciudadano sino también generar espacios de debate o colaboración que permitan potenciar la interactividad y fomentar la participación ciudadana en el trabajo público”.

En resumen, la guía aclara que una vez resuelta la estrategia hay que establecer una  línea editorial de las redes sociales, que manifieste el estilo y construcción de mensajes, qué temas se abordarán y periodicidad de publicación. Asimismo, se refiere sobre la participación de los usuarios, que siempre estará presente, pues  la conversación es constitutiva de las redes sociales.

 La Ley N°19.880 que Establece las Bases de los Procedimientos Administrativos que rigen los Actos de los Órganos de la Administración del Estado, entrega el plazo de respuesta por parte de la Oficina de Reclamos y Sugerencias (OIRS),  el cual no debe superar los 10 días desde realizada la consulta. Además, establece como canales formales 3 espacios de atención, presencial, telefónico y plataforma web.

No obstante, pese a que las Redes Sociales ya son un canal validado por los usuarios, no existe una normativa que regule el cumplimiento de las respuestas, lo que significa que solo es tomado como una “buena práctica” responder a través de estos medios sociales, pese a considerar la conversación como un valor inherente a ellas..

Teniendo esto en cuenta, el community manager (si la institución posee uno con la experiencia necesaria) debe tener claro qué instrucción debe seguir, si responderá inmediatamente a través de la cuenta o los integrará a los sistemas formales establecidos por la institución como el Sistema Integrado de Atención a Clientes (SIAC) u OIRS.


¿Debemos ocuparlas todas?

Alejandro Piscitelli, dice que “el mundo digital es una moda eterna. No hay plataforma o aplicación que dure demasiado”, y en efecto, tiene razón, sin embargo esta moda no debe ser justificación para su uso por parte de la organización si esta no cumple con los lineamientos de la institución, una real funcionalidad para el usuario o si la interacción es baja o se produce con el público no objetivo.

Para generar mayor interacción es claro que hoy los medios sociales no sólo deben servir para publicar información, actividades o beneficios, debe existir una sintonía  con el público o como dice Giuseppe Pacheco “escuchar (a los usuarios) también te permite crear valor hacia tu marca/empresa, consolidando el estatus dentro de la mente de tus públicos… Demostrar interés en la comunicación recibida genera un impacto muy favorable en los públicos, como responder un mensaje personalizado”.

Los usuarios han ido evolucionando, ahora son cada vez más críticos con la información que se les proporciona, hoy buscan contenidos que realmente sea un aporte, “los consumidores/clientes ya no solo desean estar bien informados, ahora han pasado a un segundo nivel, mucho más exigente, sabiendo que poseen en sus manos una poderosa arma !un móvil inteligente o una tableta! Con la que pueden atacar a la empresa si ésta no actúa de una manera adecuada, es decir, con información real y transparente, un trato adecuado, sumado a que se preocupen, no solo por el presente, sino por el futuro del producto/servicio que ofrece”. Pacheco

Ello que permite conectarse más rápidamente con los usuarios y conocer cuáles son sus necesidades, información, que puede mejorar la labor de comunicación corporativa. Hay que hacer la salvedad que este “puente” entre institución o empresa y público como lo llama Pacheco  puede darse en diferentes formas, halagos, reclamos y denuncias, por lo que el organismo debe estar predispuesto a ello, procurando entregar respuestas en un tono cordial sin entrar en discusión.

Una buena medida será crear una política de redes sociales que establezca, en primer lugar, profesionalizar el trabajo del community manager; en segundo lugar,  entregar lineamientos claros para revisar en forma exhaustiva y profunda la participación de la instituciones en las redes sociales y control de las cuentas (satélites o fantasmas) respecto del cumplimiento de sus objetivos institucionales ; y asimismo, establecer claramente la responsabilidad en la interacción y respuesta que se les da a los usuarios.

Foto 2: Ejemplo de mensajes reiterativos y poco atractivos
Un ejemplo de ello y de la debilidad de una estrategia clara, es el uso excesivo de cuentas satélites, que no aportan en contenido al público, sino solo territorial. Un ejemplo de ello lo podemos ver en la estrategia de difusión de la institución que repite el mismo mensaje a través de 15 cuentas diferentes, con lo que con un poco de creatividad o profesionalización de la labor podría obtener mejores resultados.



Otro ejemplo lo podemos ver en las cuentas fantasmas o inactivas, las cuales poseen una identificación clara de la institución, sin embargo están desactualizadas y confunden al usuario. En este caso la falta de un protocolo sobre la creación y registro de cuentas, resguardo de claves de seguridad, asociación con correos electrónicos y traspaso de ellas a nuevas autoridades es un tema a resolver, porque afecta la imagen de la institución.  Es importante subrayar que son cuentas institucionales y, aunque, hayan sido creadas en por autoridades o en administraciones específicas no pueden adueñarse de ellas, puesto que hay una cantidad de seguidores de por medio.

Foto 3. Ejemplo de dos cuentas para una misma institución.


Para muchos puede que estos ejemplos representen pequeños detalles, pero sin duda marcan la diferencia, contribuyen a mejorar la imagen, a difundir mensajes eficientes y profesionalizan la labor.




  • Blogs (ej: Blogger, Wordpress)
  • Microblogs (ej: Twitter)
  • Redes Sociales (ej: Facebook)
  • Comunidades Digitales (ej: Bligoo, Ning)
  • Canales Sociales de Video (ej: Youtube, Vimeo)
  • Canales Sociales de Audio (ej: Radio, Podcast)
  • Canales Sociales de Fotografía (ej: Flickr, Picasa)
  • Wikis
  • Foros de Discusión
  • Listas de Discusión
  • Repositorios de Documentos (ej: ISSUU, Scribd, Slideshare)
  • Encuestas de Opinión
  • Sistemas de Votación
  • Sistemas de Clasificación Social (Etiquetas)
  • Agregadores (RSS) 

Fig. 2, Medios que se pueden incluir en la comunicación institucional.





jueves, 28 de mayo de 2015

Farmacias de Turno Santiago (trabajo)

Generalmente nunca sabemos cuáles son las farmacias de turno en nuestras comunas, ni tampoco cuáles son las que mayor presencia tienen en nuestra comuna o el mayor número. Es por ello que acá dejamos algunos de las principales locales que estarán operativos durante este fin de semana.